EL RESUMEN EJECUTIVO DE NUESTRO PLAN DE NEGOCIO

El resumen de nuestro plan de negocio es lo primero, y muchas veces lo único que un posible destinatario de nuestro plan de negocio -inversor, posible socio, entidad financiera, colaborador, etc.- leerá.

Es, por tanto, uno de los contenidos esenciales de nuestro plan de empresa. Lo incluiremos al inicio del documento, pero será lo último que redactaremos.

Debemos tener en cuenta que el resumen debe referirse al documento que efectivamente resume, y que se recomienda que el orden de las informaciones que contenga coincida con el del plan de negocio.

¿Longitud? Mejor una cara de Word que dos. Si aportamos gráficos o imágenes la longitud será de dos caras.

¿En qué parte del contenido se fijará especialmente el lector?

  • En nuestro producto/servicio y en lo que dicho producto o servicio resuelve o mejora. También debemos explicar nuestro modelo de negocio: cómo vamos aportar valor al cliente y cómo vamos a conseguir una contraprestación por ello.
  • En nuestra ventaja competitiva: aquello que nos va a hacer diferentes respecto a otros competidores, el valor diferencial que aportamos al cliente.
  • La definición de nuestro público objetivo. El lector valorará una exposición breve, clara y concisa del segmento de consumidores al que nuestro producto o servicio va dirigido.
  • El equipo promotor: nombres, estudios y experiencia profesional. Este apartado otorga credibilidad a nuestras pretensiones. Si aportamos patentes, debemos también especificarlas.
  • Exponer qué buscamos, qué deseamos obtener presentando nuestro plan de empresa y el resumen. Si pretendemos conseguir financiación sería interesante indicar con qué fondos propios contamos y el tiempo estimado de recuperación de la inversión. Lo que sí es imprescindible es que las cifras monetarias sean exactas y se incluyan de forma gráfica, ordenada y consistente (siempre con el mismo formato).
  • Orientación sobre el horizonte temporal, indicando unos objetivos razonables para los plazos indicados.
  • El cierre es interesante que sea emotivo o contundente.

Una vez redactado debemos repasar el resumen, y fijarnos en los siguientes aspectos:

  • Los datos deben guardar una rigurosa coherencia con los aportados en el plan de negocios completo. Cuidado con los redondeos: son preferibles las cifras con dos decimales que cuadren a la perfección.
  • Repaso minucioso a la ortografía, puntuación y gramática. Un buen resumen desmerece cuando cometemos este tipo de errores. Las cifras de los años no llevan punto. Las frases interrogativas deben incluir tanto la interrogación de apertura como la de cierre. Cuando enumeramos e incluimos un etcétera debemos prescindir de los puntos suspensivos.
  • La organización del texto. La estructura es importante: cuanto más visual, mejor. Debemos cuidar que la separación y alineación de párrafos, sangrías, etc. sea coherente. También decidiremos el formato de los títulos, subtítulos, si es que los incluimos: opciones de cursiva, subrayado, por ejemplo. En negrita destacaremos las informaciones relevantes guardando al respecto coherencia en todo el resumen.
  • Leer y volver a leer. Revisar la redacción, que sea fluida, fácil, evitando repeticiones. Sería interesante cotejar con nuestros socios, o con alguna persona cercana si nos hacemos entender, si nuestra idea es clara.

Para la elaboración de un buen resumen ejecutivo podría ser interesante contratar a un profesional que nos ayude, ya que muchas veces es en dicho resumen donde se haya el “quid de la cuestión” de nuestro éxito en las presentaciones de nuestro plan de negocio.

¡En Emprenderioja supervisamos el resumen ejecutivo de tu plan de negocio!