A vueltas con el pago de autónomos

el pago de autónomos

Cada vez es más frecuente el número de emprendedores que acuden al Servicio con la intención de emprender pero queriendo evitar a toda costa el cumplimiento de pagos por cotización en el régimen de autónomos a la seguridad social.

Cierto es que en España tenemos una cuota para los autónomos bastante elevada, en comparación con países. Hagamos un breve repaso por varios países de Europa:

Holanda: Se pagan 50€ al año pero no cubre ningún tipo de prestación sanitaria. Para ello habría que pagar 100€ al mes aproximadamente, para contratar un seguro médico, aparte de los seguros de pensión, fallecimiento o invalidez.

Alemania: No hay Seguridad Social, por lo que no pagan nada y tienen que contratar coberturas con seguros privados.

Reino Unido: Las coberturas son similares a las de España. El importe de la cuota son unos 12€ al mes, siempre que no se superen los 6.000€ de facturación. Si lo superan pagan el 8% de los ingresos o se acuerda pagar unos 60€ al mes. Pero no tienen cobertura por incapacidad ni subsidios por desempleo. Sí tienen una pensión básica, una baja por maternidad y una prestación por fallecimiento.

Francia: Pagan los autónomos un porcentaje de su facturación (12% comercio, 21,3% servicios y 18,3% profesiones liberales). Les cubren asistencia sanitaria, jubilación, incapacidad y pensiones de invalidez o viudedad. Pero pagan al médico y luego el Estado les devuelve de entre el 65% al 100% del gasto (sistema de reembolso de gastos).

España: La base mínima de cotización es la resultante de aplicar el 29,90% de 875,70, lo que nos da 261,83€ mensuales a pagar, para todos aquellos autónomos menores de 48 años.

Como vemos, nuestra cuota es algo elevada. Pero también nuestro sistema sanitario tiene servicios mayores para todos los usuarios, inexistentes en otros países.

Tras las nuevas reformas legislativas acometidas por el Gobierno español, todos los nuevos autónomos pueden beneficiarse de unas reducciones y bonificaciones en el pago de la cuota de autónomos. Estos descuentos se aplican por tramos temporales y van desde el 30% hasta el 80%, en proceso decreciente.

Para cualquier autónomo que comienza es vital escatimar en gastos, en tanto no comience la empresa a facturar. Por ello, son muchos los trabajadores autónomos que comienzan y solicitan la exención en el pago de autónomos, con el único fin de liberarse parcialmente de un coste que les resulta un tanto elevado en sus inicios como empresario.

Personalmente creo que solicitarla en determinadas circunstancias de pluriactividad o, cuando no existe ningún tipo de prestación (contributiva o no) es más que aplaudible. Pero no debemos crear un uso generalizado para todos.

Lo creamos o no, ahí están esas bonificaciones en el pago de los autónomos que, aunque no sean el mayor de los descuentos, también debemos de ser conscientes que tenemos el sistema sanitario y social más garantista de toda Europa y que, de una u otra forma, debemos mantener entre todos.

Claro que otra solución sería el pago de autónomos en función de la facturación, algo similar a lo de Francia. Pero debemos recordar que en Francia se paga al ir al médico y que después te devuelven y en España no. Juzguen ustedes mismos.

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