Revisión del Plan de Empresa después de emprender
El Plan de Empresa es una herramienta indispensable para todo emprendedor antes de la puesta en marcha de un negocio. Desde los Servicios de Emprenderioja apostamos por su elaboración para que el futuro empresario analice en detalle todos los aspectos a tener en cuenta de su futura empresa.
Sin embargo, la gran mayoría, una vez iniciada la actividad no vuelven a revisar ese Plan de Empresa creado en la fase previa del negocio. En este artículo queremos destacar la importancia de la revisión de ese Plan de Empresa posterior, tanto a corto, medio y largo plazo.
Plan de Empresa inicial
No pretendemos que sea este artículo un manual para elaborar el Plan, para ello hay muchos recursos dentro de este blog y dentro de la web de Emprenderioja para hacerlo. Lo que queremos destacar es la necesidad de hacerlo, sobre todo desde el punto de vista interno del emprendedor. Muchas veces se realiza solo desde un punto de vista externo (porque lo pide el banco, para adjuntarlo a un expediente de ayudas,…). Pero el que nos importa es el interno. La persona debe analizar la viabilidad de su futuro negocio en cuatro planos: técnico (si es posible crearlo), comercial (si vamos a tener clientes), financiero (si podemos realizar la inversión) y económico (si va a ser rentable).
Esta primera fase acaba con la decisión del emprendedor de continuar o aparcar la idea. El no continuar no debe ser sinónimo de fracaso, todo lo contrario, es un gran acierto desechar la idea si su viabilidad es escasa tras realizar el Plan de Empresa. Fracaso es continuar adelante a pesar de que no hay signos positivos en el Plan.
Plan de Empresa a corto plazo
El emprendedor que ha puesto en marcha su negocio, en su inmensa mayoría, se olvida del Plan de Empresa que ha creado. Gestionar un negocio es vital para lograr su éxito. Y parte de esa gestión es revisar tras los primeros meses de vida de la actividad, por ejemplo al año, el Plan de Empresa que creamos inicialmente. Da igual si el negocio va bien, mal o regular.
Deberemos realizar una comparación entre las previsiones y la realidad. Eso nos ayudará a corregir escenarios marcados. En el Plan de Empresa inicial se juega a marcar posibles hipótesis, pero ahora tenemos datos reales. Las comparaciones imprescindibles que debemos realizar son:
- Análisis del mercado.- si antes del inicio éramos un mero espectador, ahora estamos dentro y podremos extraer mejores conclusiones de cómo está el mercado, la competencia, el sector… Saber amoldarnos a ello y corregir ayudará al éxito.
- Precios.- si el estudio del precio a poner a nuestros productos es parte fundamental antes de iniciar la actividad, revisar los mismos durante la vida de la empresa es todavía más importante. ¿Hemos seguido con la política de precios marcada? ¿Nos hemos desviado? ¿Por qué? Sentarse a analizar los precios es siempre indispensable para el devenir de nuestro negocio.
- Análisis económico y financiero.- Si en el plan inicial es quizás la parte más importante del proyecto, tras un año, es imprescindible pararse a analizar las diferencias entre lo proyectado y lo que realmente está sucediendo. Se trabajará en los dos planos: el financiero donde podremos ver el activo y pasivo de la empresa, si las inversiones se han cumplido, si hay que realizar nuevas, si disponemos de pasivo para los próximos meses, como está la financiación solicitada…; en el plano económico analizaremos la cuenta de resultados del negocio, los ingresos y los gastos. ¿Se ha cumplido nuestra expectativa de ingresos? ¿Cuál ha sido la evolución de los mismos? ¿Tenemos los gastos previstos o han aumentado? ¿Cómo podemos mejorar el resultado económico?
Plan de Empresa a largo plazo
Si nuestra empresa tiene un “largo plazo” ya tenemos algo positivo, hemos logrado pasar lo peor, sin embargo no nos podemos detener, debemos seguir buscando mejorar y para ello el Plan de Empresa vuelve a ser muy útil para comparar y seguir evolucionando como empresa.
Además de centrarnos en los puntos comentados anteriormente, se deben revisar los objetivos conseguidos y tratar de evaluar alternativas en todos los ámbitos que nos ayuden a mejorar el rendimiento de nuestro negocio.
Conclusiones
Como hemos desgranado en este artículo, la importancia del Plan de Empresa no debe limitarse a una fase previa de la puesta en marcha del negocio. Debe ser una herramienta en continua evolución y revisión para todo nuevo empresario. La mayoría se olvida de él nada más iniciar su andadura empresarial, pero pararse cada cierto tiempo a reformarlo, adaptarlo y compararlo es muy importante para la supervivencia del negocio.
Los emprendedores deben entender que ser empresario no es solo ser un buen trabajador. Debemos convertirnos en buenos gestores de nuestro negocio, y dentro de esta gestión, el Plan de Empresa es un apoyo fundamental para extraer conclusiones de la marcha del mismo. Como siempre decimos, el Plan de Empresa debe estar siempre en el primer cajón de nuestro negocio, viéndolo constantemente.
Desde Emprenderioja también disponemos de herramientas de consolidación, de medidas para ayudar a los nuevos empresarios a mejorar, pero sobre todo a ver la importancia de estar en continua alerta sobre la marcha de nuestra actividad e intentar crecer como empresa.
Alberto Mesas
FER